"Alborada" es el cuarto álbum de estudio de Pipo Romero, y marca un nuevo capítulo en su evolución artística. Inspirado en la primera luz del día, el disco fusiona las tradiciones folclóricas españolas con influencias atlánticas, interpretadas a través de su característica guitarra de cuerdas de acero, en un diálogo constante entre la raíz y la experimentación contemporánea.
Cada composición explora texturas y estructuras rítmicas complejas, manteniendo una profunda conexión con su herencia cultural mientras amplía los límites de la música acústica. Con influencias del flamenco, el folk americano, el impresionismo y la electrónica, el álbum propone un lenguaje propio, en el que cada tema funciona como una escena dentro de un cuaderno de bitácora emocional.
La mezcla de sonidos acústicos y electrónicos no es casual, sino estructural: sintetizadores, cajas de ritmo analógicas y samples conviven con cajones, palmas y castañuelas, expandiendo el imaginario de lo que puede ser el folclore contemporáneo.
El álbum nace en un momento de incertidumbre, cuando todo parecía haberse detenido. Pero es precisamente en esa búsqueda donde emerge esta alborada: una luz que devuelve el impulso de seguir creando. El resultado es un disco honesto, melódico y sorprendente, lleno de detalles, giros inesperados y emoción genuina.