La orquesta más contemporánea e innovadora del País Vasco ha vuelto. De nuevo de la mano de Jimmy Bidaurreta, la Gasteiz Big Band nos presenta su cuarta grabación dentro de la colección Dantza Baltza, compuesta de cuatro temas, y una vez más nos deleita con una muy disfrutable y sugerente propuesta para bailar, que funde varios géneros de la música popular y nos ofrece una nueva lectura de la tradición, actualizada y adecuada a los tiempos en los que vivimos. En esta ocasión, vuelve a recurrir mayormente a temas compuestos en décadas pasadas, temas conocidos de jazz, pop o de música popular tradicional, y los lleva al terreno del hip-hop o la música latina.

El tema que abre el vinilo de 10 pulgadas -y que justifica el título del mismo- es un homenaje al inolvidable Duke Ellington. La orquesta se apodera de la canción que Steve Wonder compuso para homenajear a Ellington, Sir Duke, y la convierte en una pieza típica de big band, plena de swing y elegancia, y aderezada con una de las señas de identidad de la Gasteiz Big band, el uso del scratch.
Una de las sorpresas del disco es la re-interpretación de la Retreta de San Prudencio, tema especialmente querido por los y las alavesas, respetando la melodía original pero añadiéndole una buena dosis de hip hop, con la ayuda del grupo de rap Kodigo Norte.
La Gasteiz Big Band se atreve con todo, también con canciones pop de gran éxito comercial. Por ejemplo, Clocks de Coldplay.
Música en plena evolución