Dicen que conocer el camino no es andarlo y mucho menos cuando se trata de un camino tan sinuoso y serpenteante como es el del Blues. Esa carretera donde la magia y el sentimiento se hacen realidad en cada recodo. La emoción puede estar en la siguiente curva para aquel que sepa entender un lenguaje universal cuyas raíces rurales nacen en la segunda década del siglo XX, transitado por las orquestas de Kansas City en los treinta y su llegada a las calles de Chicago tras la segunda guerra mundial. El camino perfilado por el Blues en las siguientes décadas no solamente ha puesto los cimientos a la inmensa mayoría de estructuras musicales de la música contemporánea sino que además, a día de hoy, lo siguen recorriendo infinidad de músicos a lo largo y ancho de todo el mundo.
Esta banda formada en Bilbao por Mario Gómez (voz y guitarras) Carlos Jover Cuenca (armónica y voz), Jorge Gómez ( Batería) y Fabian Acarregui (contrabajo) a lo largo de más de diez años han demostrado una trayectoria basada en el respeto y la coherencia de la que han sabido hacer siempre gala ya desde su primer trabajo homónimo en 2014, donde recreaban fielmente una brillante colección de clásicos en clave de Blues rural para en 2017 editar su segundo disco “Jump and Shout” donde la banda rueda desde el Blues de Chicago, pasando por el West Coast o el Jump Blues con el mismo rigor que en su anterior trabajo y con el valor añadido de ser un disco de temas originales. The Blues Morning Singers es el ejemplo paradigmático de que la mejor escuela es el camino andado y la mejor maestra siempre es la carretera. Muestra de ello son tanto las giras realizadas durante todo este tiempo como su paso por festivales de prestigio internacional como el Festival Internacional de Blues de Getxo, Festival de Hondarribia, Festival de Blues de Burlada, Jazz Zaharrean de Vitoria o Agurain Jazz.
Grabado en los estudios Kantauri de Bilbao, “Winding Road” además de contar con la colaboración de músicos de la talla de Alberto Trigueros en el piano y teclados y Javier Alzola en el saxo, pone de manifiesto y consolida la carrera de una banda que sigue la estela ascendente que marcó su anterior trabajo. Una colección de seis canciones originales que abundan en la más pura tradición Blues desde una perspectiva más sofisticada y madura. Una producción que transita y nos retrotrae al Blues de los sesenta en la canción que da título al disco “Winding Road” con aromas cercanos a Booker T gracias al órgano hammond y la innegable huella de Sonny Boy Williamson con Carlos Jover a la armónica. “Confusion Blues” sigue perfectamente los cánones del Jump Blues en un tiempo perfecto ejecutado por parte de Jorge Gómez en la batería y Fabi Acarregui en el contrabajo, la impecable factura a la voz y a la guitarra de Mario Gómez. “Learning to say no” sigue la tradición de los temas escritos por Carey Bell en los setentas en clave de vigoroso “shuffle” a un solo paso del Funk, mientras “Lotto Prize” nos traslada a la vieja escuela de Chicago de los cincuenta. A medio camino entre la heterodoxia de Nueva Orleans y el “Jive” más festivo, la banda en un nuevo alarde de versatilidad despliega “Under the Rain” para cerrar con “Talk to the devil” posiblemente el corte más oscuro, original e intenso del disco con Carlos Jover a la voz y Mario Gómez realizando un magnífico trabajo en el slide guitar.
Dicen que conocer el camino no es andarlo. Los Blues Morning Singers son una de esas bandas que transitan con fidelidad y rigor desde hace años ese sinuoso y serpenteante camino que es el Blues y “Winding Road” es el resultado, tal vez sea esa carretera llena de recodos y curvas, donde la magia y la emoción se hacen realidad para todos aquellos que saben entender este lenguaje universal.